No tengas mente de ladrillero

NO TENGAS MENTE DE LADRILLERO





Oscar Castro – Mayo 2006




Voy a hablarles de dos discípulos de Jesús: Pedro y Juan.
El nombre original de Pedro era Simón. El era casado y su origen era Betsaida, una ciudad griega, aunque también tenía casa en Capernaún. Ambos lugares estaban a orillas del lago llamado Mar de Galilea, donde el era pescador.
Juan era un galileo impetuoso, ya que fue uno de los llamados “hijos de trueno”. Sus padres tenían buena posición porque su padre era pescador y “tenía jornaleros” (Marcos 1:19-20):

1:19 Pasando de allí un poco más adelante, vio a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan su hermano, también ellos en la barca, que remendaban las redes. 1:20 Y luego los llamó; y dejando a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros, le siguieron.

Siempre hemos escuchado, que cuando Jesús llamó a sus discípulos, ellos lo abandonaron todo, a sus padres y a la pesca. Ellos antes de ser llamados, podían ofrecer de sus peces, que era el producto de su trabajo, es decir, del servicio de sus dones, de sus dones, de sus talentos, de su adiestramiento y de su educación.
Quiero que ustedes tengan en cuenta el concepto de lo que significa trabajo : “trabajo es aquel servicio realizado por el ser humano que es atribuible a sus dones naturales”.




“trabajo es aquel servicio
realizado por el ser humano
que es atribuible a sus
dones naturales”.



Y ahora ellos dejaron todo para ser discípulos de Jesús, para estar bajo su disciplina. Y ellos llegaron a los pies de Jesús con sus demandas. Uno de ellos, inducido por su madre, el querer sentarse a Su derecha y otro, su impulsiva devoción que nos muestra una demanda de carácter, una demanda de instrucción en la ley de Dios. Pero después de ser discipulados por Jesús, ahora, ellos tenían más que dar; más que aquel servicio atribuible a sus dones naturales. Ahora Pedro era “pescador de hombres”. Ya no solo ofrecía peces, sino hombres (Mateo 4:19 Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres), como producto no solo de su trabajo, de sus dones, de su adiestramiento como pescadores, sino además como producto de los dones de Dios, ya no solo venían a pedir a la iglesia (los convocados por el Señor), sino ahora tenían más que dar.



En el libro de Hechos 3, hay un pasaje acerca de Juan y Pedro; ellos encontraron a un hombre que estaba discapacitado, ojo, discapacitado desde su nacimiento y este hombre esperaba recibir algo de ellos. Esta era una buena oportunidad de Juan y Pedro para dar y ellos tenían algo más que dar, algo más precioso que el oro y la plata.

El objetivo para cualquiera que tuviera una pesquería como la de ellos, es decir, el objetivo para cualquier empresa o negocio de éxito es obtener ganancias, que en su tiempo era oro, plata o cobre, es decir, dinero.
Pero ellos le dijeron (Hechos 3:6) :

Mas Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda.

Como dijera el economista Ruskin “ya no estaban más al servicio del despilfarro y del vacío eterno, sino del servicio de la sabiduría y de la plenitud eterna…..no existe más riqueza que la vida”.
¡Levántate y anda!, ya sus pensamientos no estaban enfocados en cómo hacer riqueza de este mundo, sino en algo mucho más satisfactorio en decirle al hermano, al amigo, “estás sano en el nombre del Señor”.


Ahora ustedes no solo están conformes con su trabajo, con sus talentos sino quieren dar, no solamente eso, sino más que eso, porque ahora que están bajo la disciplina del Señor, en la escuela de Cristo, tienen más que dar. Quiero hacer un paréntesis en este punto: uno de los pasos de la visión es discipularlos para que sean embajadores de Cristo y dentro de nuestra misión como iglesia esa es una de nuestras mayores preocupaciones, más que preocupaciones, ocupaciones , es discipularlos, ¿porqué? Porque cuando el hermano es discipulado, pasa de ser un demandante, a un ofertante, nosé si me estoy dejando entender. Primero venimos pidiendo de todo, no solo a la iglesia, sino a la sociedad, a nuestra nación, venimos pidiendo sanidad, pidiendo prosperidad, trabajo, venimos pidiendo solución a nuestros conflictos, venimos con nuestros demonios de adentro, ¿o no somos liberados de demonios?¿a ver, quién no ha sido liberado?. No tenemos lucha contra sangre y carne sino contra huestes espirituales de maldad. Si en ti todavía no hay lucha, nosé que haces aquí. Primero hemos venido pidiendo de todo, pero una vez que has sido discipulado, ahora tienes algo más que ofrecer. Ustedes ya conocen nuestra misión ¿Cuál es? : Ganar, discipular, evangelizar y enviar. Muy bien, repito ahora, ya no somos mas, demandantes, ahora somos ofertantes. Ahora tenemos que ofrecer más a Dios y a los demás.


El Señor Jesús cuando mandó a sus discípulos en Mateo 10, les dijo que vayan y que prediquen el evangelio del reino y que no lleven nada , ni alforja ni túnica , ni calzado, ni oro , ni plata, ni cobre; que vayan y que prediquen que el reino de los cielos está cerca
.
En Mat 10: 7-8 Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado.10:8 Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia.
Estuve buscando literatura o enseñanza acerca de esta expresión “de gracia recibiste, dad de gracia” y encontré abundante enseñanza, pero algo curioso, en ninguna de las enseñanzas dice qué hemos recibido de gracia, como lo dice el contexto, a ellos les encanta mucho hablar de “exégesis”; ellos están concentrados en el texto, en su construcción gramática y sintáctica; pero a menudo olvidan este principio de interpretación. Escuchen bien: toda interpretación textual fuera del contexto es errónea . Ahora volvamos a leer el versículo 8:

10:8 Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia.

Entonces ya que hemos recibido de gracia ¿Qué hemos recibido? Sanidad , muy bien. Hemos sido sanados cuando estábamos enfermos, estábamos llenos de lepra, sea lepra espiritual o lepra emocional, o ¿Porque no , lepra física? Hemos estado muertos, hemos tenido nuestros demonios que han sido hechados fuera . ¡Si recibiste de gracia, entonces, da de gracia!!.
Venimos demandando y recibimos de gracia , sin merecerlo, ahora quiere el Señor que seamos ofertantes , que ya no solo pidamos sino que demos de gracia, no porque se lo merecen, no por su inteligencia, no por su belleza, no por su trabajo, sino de gracia, porque no se lo merecen.

de gracia recibisteis,
dad de gracia.


Así como recibimos gratis, tenemos que dar gratis; otra vez ¿Qué hemos recibido hermanos? (ininteligible) , tenemos que dar sanidad , tenemos que levantar a los muertos, tenemos que liberar a los que estan en esclavitud del diablo, tenemos que llevar sanidad a todas las naciones y no digo a Piura, sino a todas las naciones.
Sino estamos dando, creo que es cuestión de mente, sino estamos dando, estamos creyendo la mentira del diablo que te dice que es “ preferible lo malo conocido, que lo bueno por conocer”.


En el libro de Éxodo capítulo 3, hay varias enseñanzas acerca de esta mentira del diablo y nosotros vamos a ver algo interesante, que ninguno puede hacer una obra sino tiene mente de ofertante, en EXODO 3:17 – 18

3:17 y he dicho: Yo os sacaré de la aflicción de Egipto a la tierra del cananeo, del heteo, del amorreo, del ferezeo, del heveo y del jebuseo, a una tierra que fluye leche y miel.3:18 Y oirán tu voz; e irás tú, y los ancianos de Israel, al rey de Egipto, y le diréis: Jehová el Dios de los hebreos nos ha encontrado; por tanto, nosotros iremos ahora camino de tres días por el desierto, para que ofrezcamos sacrificios a Jehová nuestro Dios.
El Señor prometió al pueblo de Israel, que los iba a sacar de Egipto, y dice que los iba a llevar a una tierra donde fluía leche y miel, donde ellos ya no iban a trabajar como antes trabajaban, hay un versículo que dice, “ que como antes trabajaban llevando agua con sus pies a sus tierras de cultivo” ya no sería así, sino que de esa tierra iba a brotar leche y miel. Dios les estaba llevando a una tierra totalmente diferente, en la cual ellos iban a tener bendiciones y dependerían de Dios, aquí les está diciendo:

3:17 y he dicho: Yo os sacaré de la aflicción de Egipto a la tierra del cananeo, del heteo, del amorreo, del ferezeo, del heveo y del jebuseo, a una tierra que fluye leche y miel.3:18 Y oirán tu voz; e irás tú, y los ancianos de Israel, al rey de Egipto, y le diréis: Jehová el Dios de los hebreos nos ha encontrado; por tanto, nosotros iremos ahora camino de tres días por el desierto, para que ofrezcamos sacrificios a Jehová nuestro Dios.

¿
Para qué los estaba sacando Dios al pueblo hebreo?, ¿para qué los estaba sacando de la esclavitud?, ¿porqué tenían que decirle a faraón y decirle esto, para planificar que cosa???, bueno leamos nuevamente, la última parte del versículo 18, “ PARA QUE OFREZCAMOS SACRIFICIOS A JEHOVA NUESTRO DIOS”, Dios dejó bien en claro que El quería libre a su pueblo, ¿para qué? ¿Para que pudieran qué? OFRECER, muy bien, El quiso dejar libre a su pueblo para que pudieran ofrecer. Cuando las personas son libres de aflicciones o vamos a llamarle ataduras, entonces ahora pueden ofrecer a Dios, y para eso Dios nos ha sacado de Egipto que es un tipología del reino de las tinieblas, para que nosotros podamos ofrecer a Dios, no a demandar de Dios, que nosotros demos ahora al pueblo de Dios y no demandemos del pueblo de Dios. El problema aquí del pueblo de Israel era su mentalidad, ahí en el libro Éxodo 5: 1 – 3:

5:1 Después Moisés y Aarón entraron a la presencia de Faraón y le dijeron: Jehová el Dios de Israel dice así: Deja ir a mi pueblo a celebrarme fiesta en el desierto.5:2 Y Faraón respondió: ¿Quién es Jehová, para que yo oiga su voz y deje ir a Israel? Yo no conozco a Jehová, ni tampoco dejaré ir a Israel. 5:3 Y ellos dijeron: El Dios de los hebreos nos ha encontrado; iremos, pues, ahora, camino de tres días por el desierto, y ofreceremos sacrificios a Jehová nuestro Dios, para que no venga sobre nosotros con peste o con espada.

Ustedes pueden ver en este versículo: Deja ir a mi pueblo a celebrarme fiesta en el desierto . Miren, Dios quiere que el pueblo sea libre, y no solamente quiere que su pueblo sea libre sino, ¿que celebre que? Fiesta, que su pueblo sea libre y que su pueblo celebre fiesta, lo que pasa aquí, vuelvo a repetir, es cuestión de mente, a los israelitas se les olvidó que ellos trabajaban a favor de los egipcios, ellos creyeron que ellos comían por los egipcios, ellos creían que los egipcios les daban de comer, ellos creían que mientras eran esclavos, estaban seguros del alimento a tal punto que cuando Dios libera al pueblo de Egipto y ellos estaban en el desierto, comienzan a murmurar contra Dios y comienzan a decir “Acuérdense de las ollas de Egipto, acuérdense del pan, de la carne, incluso, acuérdense de los sepulcros que teníamos en Egipto”

14:11 Y dijeron a Moisés: ¿No había sepulcros en Egipto, que nos has sacado para que muramos en el desierto? ¿Por qué has hecho así con nosotros, que nos has sacado de Egipto?

16:3 y les decían los hijos de Israel: Ojalá hubiéramos muerto por mano de Jehová en la tierra de Egipto, cuando nos sentábamos a las ollas de carne, cuando comíamos pan hasta saciarnos; pues nos habéis sacado a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud.
El pueblo comienza a murmurar contra Dios, nos han sacado para que nos muramos en el desierto, eso es lo que el pueblo comienza a reclamar, ¿porqué? Ellos creían que dependían de Faraón, y ellos creían que si no estaban con faraón iban a morir de hambre, era mejor estar comiendo el pan de Egipto, les pregunto: ¿los egipcios comían por Israel o los israelitas comían por Egipto? Por supuesto ellos se habían olvidado que por la sabiduría de José, por esa sabiduría de José, el pueblo de Egipto estaba vivo, acuérdense que José tuvo la sabiduría, tuvo un sueño. Ustedes se acuerdan de las vacas gordas y de las vacas flacas, ustedes se acuerdan de ese sueño, esto hizo que José guardara para los años de escasez, mientras que las otras naciones se morían de hambre, mientras que el mismo pueblo de Israel necesitaba de comida, José había preparado todo para que Egipto sobreviviera, ahora el pueblo de Egipto estaba en pie no por causa de ellos sino por causa de los israelitas; ellos comían por causa de los israelitas, por el pueblo de Dios, pero, ¿qué había pasado? aquí la mente de ellos se había invertido, aquí ellos tenían mente de ladrilleros, ellos preferían estar haciendo ladrillos para faraón, ellos preferían regresar a Egipto y que les pongan todas las cargas que ya no solamente ladrillos, sino a la vez siembren la paja, cosechen la paja y hagan todo el trabajo, ¿porque? ¿Porque prefrían eso?, por la mente. ¡En el colmo!, hasta se habían adaptado a la forma de enterrar a los muertos a la manera de los egipcios; a su manera idolátrica de trascender.

Dios les había dado mente de conquistadores, por eso les había dicho “vayan a la tierra de los saduceos, vayan a la tierra de ellos y conquístenlas ahí van a encontrar una tierra que fluye leche y miel”, pero ellos se olvidaron de que eran conquistadores, se olvidaron de tener mente de conquistadores y pasaron a tener mente de ladrilleros. Si nosotros si lo aplicamos a nuestra vida, tenemos que dejar también de tener mente de ladrillero (con el respeto que se merecen los que hacen ladrillos), por que Dios nos ha llamado para que nosotros tengamos mente de ofertante, más no mente de ladrillero extrañando las ollas de Egipto y sus sepulcros. Acuérdense que Dios nos ha llamado porque nosotros somos más que vencedores; el diablo nos quiere engañar, nosotros estamos bien, no porque el mundo está bien, nosotros estamos bien no porque nosotros comemos del mundo o porque nosotros vivimos del mundo. El mundo esta bién por nosotros, no nosotros por ellos, porque el Señor nos ha dicho que somos la sal de la tierra y yo le creo.

La Biblia en el libro de Hechos dice que nosotros somos llamados para trastornar al mundo, es decir para poner de cabeza al mundo, el mundo no está de cabeza, nosotros hemos sido llamados para ponerlo de cabeza, no nos han llamado para que nosotros estemos de cabeza, es al contrario, ¿que mente tenemos? Estamos creyendo las mentiras del diablo, ven a los evangélicos y a otras iglesias, a mi me da pena que muchos cristianos que tienen tanto amor al Señor pero muchos de ellos están creyendo las mentiras del diablo, están creyendo que tienen la mente de ladrillero, no estudian, no trabajan, no completan lo que empezaron ¿por qué?.No tienen ninguna perspectiva de su vida. A mi me contaba un vecino pentecostal que su hijo viajó a Lima e estudiar medicina y el ha estado alejado de la iglesia; el ha regresado a Piura ya como médico y los jóvenes de la iglesia se estuvieron preparando en temas científicos para poder persuadirle para que regresara a su congregación. El joven médico le refutó y les dijo que “con qué autoridad le hablaban de ciencia” y les preguntó a cada uno de ellos: qué hacían con su tiempo, que si ellos estudiaban. Ellos respondieron que ellos no estaban estudiando porque el Señor ya venía pronto.

Me da pena por esos jóvenes porque el diablo les está engañando les está dando mente de ladrillero, el Señor nos ha dado una mente de conquistadores, para conquistar el mundo, para nosotros ser los gobernadores como José hijo de Jacob, para nosotros tener los mejores lugares, los mejores puestos, Dios nos ha escogido para ser los mejores estudiantes, para cumplir con nuestro sueño , para cumplir con el propósito de Dios, nosotros somos conquistadores y no hay límite de edad, ni ancianos, ni niños, todos tenemos la mente de conquistadores.

Dios no quiere que tengamos mente de ladrillero, aquí vuelvo a repetir el diablo nos está engañando, así como engañó al pueblo de Israel les hizo creer que ellos vivían por Egipto, la nación que les tenía en esclavitud, que los tenia haciendo ladrillos; ellos no querían salir de eso por que ellos pensaban que estaban mejor y decían: “aquí estamos mejor, aquí tenemos la comida asegurada”, no hermanos, Dios nos ha llamado para ser conquistadores y no pensar como esclavos. Para ese pueblo era inconcebible la idea de ofrecer algo, ¿Qué puede ofrecer un esclavo?. Para ellos era inconcebible ofrecer algo, solamente ellos pensaban en demandar, solamente en ser demandantes; pero la realidad era totalmente otra, en EXODO 1: 8 – 14:

1:8 Entretanto, se levantó sobre Egipto un nuevo rey que no conocía a José; y dijo a su pueblo: 1:9 He aquí, el pueblo de los hijos de Israel es mayor y más fuerte que nosotros. 1:10 Ahora, pues, seamos sabios para con él, para que no se multiplique, y acontezca que viniendo guerra, él también se una a nuestros enemigos y pelee contra nosotros, y se vaya de la tierra. 1:11 Entonces pusieron sobre ellos comisarios de tributos que los molestasen con sus cargas; y edificaron para Faraón las ciudades de almacenaje, Pitón y Ramesés. 1:12 Pero cuanto más los oprimían, tanto más se multiplicaban y crecían, de manera que los egipcios temían a los hijos de Israel. 1:13 Y los egipcios hicieron servir a los hijos de Israel con dureza, 1:14 y amargaron su vida con dura servidumbre, en hacer barro y ladrillo, y en toda labor del campo y en todo su servicio, al cual los obligaban con rigor.

Ustedes pueden ver, que Faraón se aprovechó de esa mentalidad, de igual manera el diablo se aprovecha de esa mentalidad para oprimirte para que no te multipliques, ¿qué es lo que pasaba con el pueblo de Dios?, que se multiplicaba, ¿qué temía el faraón del pueblo de Dios? , que se multiplicara, ahora, ¿qué puede temer Satanás? es que se multiplique el pueblo de Dios; eso es lo que puede temer y mientras nosotros tengamos una mentalidad de ladrillero, jamás el pueblo de Dios se multiplicará. Mientras que ustedes no se den cuenta que el problema está en la mente y cambiemos la forma de pensar no vamos a llegar a la tierra prometida.
En Éxodo 5: 5 – 20

5:5 Dijo también Faraón: He aquí el pueblo de la tierra es ahora mucho, y vosotros les hacéis cesar de sus tareas. 5:6 Y mandó Faraón aquel mismo día a los cuadrilleros del pueblo que lo tenían a su cargo, y a sus capataces, diciendo:5:7 De aquí en adelante no daréis paja al pueblo para hacer ladrillo, como hasta ahora; vayan ellos y recojan por sí mismos la paja. 5:8 Y les impondréis la misma tarea de ladrillo que hacían antes, y no les disminuiréis nada; porque están ociosos, por eso levantan la voz diciendo: Vamos y ofrezcamos sacrificios a nuestro Dios. 5:9 Agrávese la servidumbre sobre ellos, para que se ocupen en ella, y no atiendan a palabras mentirosas. 5:10 Y saliendo los cuadrilleros del pueblo y sus capataces, hablaron al pueblo, diciendo: Así ha dicho Faraón: Yo no os doy paja. 5:11 Id vosotros y recoged la paja donde la halléis; pero nada se disminuirá de vuestra tarea. 5:12 Entonces el pueblo se esparció por toda la tierra de Egipto para recoger rastrojo en lugar de paja. 5:13 Y los cuadrilleros los apremiaban, diciendo: Acabad vuestra obra, la tarea de cada día en su día, como cuando se os daba paja. 5:14 Y azotaban a los capataces de los hijos de Israel que los cuadrilleros de Faraón habían puesto sobre ellos, diciendo: ¿Por qué no habéis cumplido vuestra tarea de ladrillo ni ayer ni hoy, como antes? 5:15 Y los capataces de los hijos de Israel vinieron a Faraón y se quejaron a él, diciendo: ¿Por qué lo haces así con tus siervos? 5:16 No se da paja a tus siervos, y con todo nos dicen: Haced el ladrillo. Y he aquí tus siervos son azotados, y el pueblo tuyo es el culpable. 5:17 Y él respondió: Estáis ociosos, sí, ociosos, y por eso decís: Vamos y ofrezcamos sacrificios a Jehová. 5:18 Id pues, ahora, y trabajad. No se os dará paja, y habéis de entregar la misma tarea de ladrillo. 5:19 Entonces los capataces de los hijos de Israel se vieron en aflicción, al decírseles: No se disminuirá nada de vuestro ladrillo, de la tarea de cada día. 5:20 Y encontrando a Moisés y a Aarón, que estaban a la vista de ellos
cuando salían de la presencia de Faraón,

Ustedes pueden ver en esta historia en el versículo 17 Y él respondió: Estáis ociosos, sí, ociosos, y por eso decís: Vamos y ofrezcamos sacrificios a Jehová. ¿Cuál era la acusación del faraón? Era de que ellos estaban ociosos, ¿ustedes están ociosos? .Es por eso que ustedes tienen miedo de ir a ofrecer a Jehová, y hablando de ociosidad ¿estamos aquí reunidos por que estamos dando un tiempo de nuestro ocio a Dios?, hoy es domingo y domingo siete, buen día para descansar; es el día que descansamos, es el día de reposo, es el día de ocio. Lo que faraón dice lo que pasa es que ustedes están ociosos y quieren a adorar a Jehová y ellos no estaban ociosos, no era por ociosidad, sino que ellos querían darle no solamente parte del ocio, sino que querían darle parte de tiempo de su trabajo a Dios, el diablo nos introduce la idea de que mientras más ocupados estemos, menos es el tiempo que tenemos; por lo tanto es menos el tiempo que tenemos que darle a Dios, porque cuando más ocupados estamos, tenemos menos tiempo de ocio. Dios es el que recibe menos tiempo.

¿Se han dado cuenta ustedes de eso?, mientras más ocupados, más trabajo, mientras más bendiciones recibimos, menos tiempo para darle a Dios; porque el que va a pagar los platos rotos va a ser el poco tiempo de ocio que tenemos de dedicarle a Dios. Y es así como satanás va cambiando nuestra mente, y es al contrario hermanos, es cuando más ocupado, cuando más bendiciones tenemos, cuando más somos promovidos en el trabajo, cuando más oportunidades tenemos, es cuando más tenemos que ofrecer a Dios, este es el sacrificio que Dios quiere, yo no creo que el venir aquí el domingo, sea sacrificar mi ocio, ¿estamos pensando así?. De repente por ahí decimos: “cambiemos de horario por que en la mañana es más bonito porque en la tarde tenemos tiempo para descansar” y me puse a pensar que hubo un turno en la mañana, pero llegaban pocos hermanos, pero si quieren cambiar de turno háganlo, pero de repente el diablo tiene razón, estamos ociosos y por lo tanto estamos buscando pretextos para no adorar a Dios, el diablo trata de meternos mentiras para que no hagamos lo que Dios quiere y no le sirvamos. Si se dan cuenta el faraón tenía su estrategia, su estrategia era hacerles creer que ellos estaban ociosos, ahora el diablo les mete la misma idea en la cabeza, que solamente le tenemos que dar el tiempo de ocio a Dios. Luego, ¿cómo ataca el diablo? , como atacó faraón, y la forma en que lo hizo era dándoles más trabajo, y ahora ¿de que forma te va a atacar el diablo?, dándote más trabajo, porque el sabe que en medio de tu trabajo, no le vas a dar un tiempo a Dios. Cuando tu pares tu trabajo y digas “primero es Dios”, entonces tu estás cambiando tu forma de pensar, estás teniendo mente de conquistador.

¿Se dan cuenta hermanos cual es el proceso para tener mente de ladrillero? Más dinero, más trabajo, ahora tienes menos tiempo de ocio para darle a Dios, por lo tanto el diablo te va a seguir dando más trabajo. Tienes que darte cuenta que cuanto más le dediques tu tiempo a Dios, más te va a bendecir, mucho más, porque Dios no es mentiroso; el diablo no te va a traer prosperidad, te va a traer más trabajo. Al pueblo de Israel le trajo más trabajo pero no le trajo prosperidad; el los hizo totalmente esclavos, y ustedes van a seguir con la mente de esclavos necesitando del diablo, porque la cosas no les van a funcionar bien, los negocios los trabajos no les van a funcionar bien, y siempre van a necesitar del diablo, como ellos necesitaban del faraón, van a creer que ustedes son menos, van a creer que ustedes son pocos, que ustedes no valen; que ustedes no sirven. Hermanos es muy importante saber que es bueno tener talentos, es bueno tener dones, pero los dones, los talentos solamente son de un momento, si tienes dones, gloria a Dios por ellos, pero son de un momento, a Dios no le importa tanto los dones sino los frutos, no se si me dejo entender, no nos confundamos estamos hablando de RECIBIR DE GRACIA, y DAR DE GRACIA, es bueno tener dones, pero yo también quiero aclarar esto, que es mejor tener frutos que tener dones; tenemos que tener frutos para tener qué dar, tenemos que tener mente de ofertante, tenemos que tener mente de conquistadores , que el diablo no los siga engañando, tienen que cambiar su forma de pensar son conquistadores, el Señor quería liberar al pueblo de Israel de la opresión, y como dice el texto bíblico, Dios quería que le celebraran fiesta en el desierto, y que ellos se levantaran como un ejército conquistador para que tomaran la tierra prometida, pero a los israelitas les costó creerle a Dios, pues ellos tenían una mente tan estrecha, que no les permitía verse a si mismos, como Dios los veía a ellos, ¿Dios como nos ve a nosotros? ¿Acaso nos ve como ladrilleros?, ¿acaso nos ve como derrotados?, Dios nos ve como triunfadores, Dios nos ve como conquistadores, pero ellos tenían la mente tan estrecha que ellos no veían cómo Dios los veía a ellos, y dice Dios que los demás de ellos se quedaron postrados, ¿dónde? en el desierto, lo más de ellos se quedaron postrados en el desierto, no entrando a la tierra prometida, y puede pasar lo mismo a nosotros, que nos quedemos postrados en el desierto y no entremos a la tierra prometida. Dios se fastidió cuando vió lo que faraón hizo en la mente de ellos, y El también se fastidia cuando ve lo que el diablo está haciendo en sus mentes. Los está haciendo demandantes eso es lo que el diablo hace, Dios quiere que nosotros tengamos mente de ofertantes El dijo al pueblo de Israel SAL Y OFRECE, porque quería cambiarle su mente. El quiere cambiarte la mente, cuando tu eres transformado por el ESPIRITU SANTO, ya no son más demandantes, ahora ustedes son ofertantes, porque tienen algo más que ofrecer, igual que Pedro que ya no solo eran los peces que ofrecer, sino mucho más. Ahora no nos creamos esa historia que somos del tercer mundo y no tenemos nada que ofrecer, nos han dicho que los del primer mundo son los del norte y los del tercer mundo son los del sur, ni del norte ni los del sur creamos ese cuento, porque no somos ni del primero, ni del segundo ni del tercer mundo, nosotros los hijos de Dios no somos de este mundo. Nosotros tenemos un reino celestial, no nos creamos esa historia que somos los pobrecitos del tercer mundo y porque somos los pobrecitos del tercer mundo, somos menos que los del primer mundo. Ustedes están preparados, están capacitados hermanos, ustedes conocen pero más que conocer, ustedes tiene la unción de Dios. No tienen porqué decir que son del tercer mundo es mentira hermanos, pamplinas (risas), nuestra ciudadanía no esta aquí en la tierra nuestra ciudadanía es celestial, que otros crean que su ciudadanía está en la tierra, la de nosotros está en los cielos, ustedes tienen mucho que dar de los tesoros del cielo, eso es tener mente de ofertante eso no es tener mente de ladrillero hermanos, dejemos esa mente, la del tercer mundo, no tengamos una mente mediocre, si tenemos una mente mediocre nunca vamos a llegar a ser conquistadores, muchas veces lo he dicho en especial a los hermanos jóvenes y hoy lo vuelvo a repetir , nunca debemos ser mediocres, si ya tienes en tu mente un propósito, si ya tienes en tu mente un ideal, creyendo lo que Dios quiere de ti, entonces tu no eres un mediocre, tu eres un triunfador, un campeón hermano. Si tu vas a hacer un líder en la iglesia o en un ministerio donde te llame el Señor tu tienes que tener mente de ofertante, tienes que dar, persistiendo hasta que las cosas sucedan; no tenemos porqué desanimarnos, porqué mirar atrás, no tenemos porqué entrar en competencia con otros ministerios y con otros hermanos, los que hacen esas cosas reflejan su pobreza espiritual y su mediocridad. ¿Qué somos hermanos?, somos ofertantes. Hay también la mentalidad que al único que han de sujetarse es al Señor , no sujetándose a los líderes de la iglesia puestos también por el Señor. El apóstol Pablo con ruegos y súplicas pedían que se sujeten a los líderes y a todos los que ayudan y trabajan por la obra del Señor (1 Cor. 16:16): Os ruego que os sujetéis a personas como ellos, y a todos los que ayudan y trabajan.

Tampoco crean que los que se paran en el púlpito tienen una sabiduría especial, algo místico y que ya no necesitan prepararse, no hermanos; se llega al púlpito estudiando, investigando; cualquiera lo puede hacer. No tenga esa mentalidad de mirar absortos como lumbreras al que predica, uyyy cuanto sabe uyy que preparado, no se emocionen hermanos muchas veces lo bajan de Internet muy rapidito ( risas ) y lo traen aquí, ustedes tienen que tener mente de conquistadores para eso tienen que estudiar, tienen que prepararse día y noche, sin descanso cada uno tiene que decir YO SOY UN OFERTANTE a ver digan “yo soy un ofertante” (coro) yo soy un ofertante, sí, tu eres un ofertante, tienes mente de conquistador, no tienes mente de ladrillero vuelvo a repetir: tu no tienes mente de ladrillero. Amén , Amén y Amén

DIOS LOS BENDIGA HERMANOS.